Ago 10, 2021
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador propuso que AL se retire de la proamericana Organización de Estados Americanos (OEA) y cree una nueva unión regional.
Lyubov Stepushova. “Pravda.ru.”. 09/08/2021. México es un peso pesado latinoamericano por lo que la propuesta merece atención.
No estamos con EE.UU. ni con China, estamos solos.
“Esta propuesta no es más que la creación de algo parecido a la Unión Europea, pero ligado a nuestra historia, nuestra realidad y nuestra identidad. La solicitud y consentimiento de las partes en los conflictos en materia de derechos humanos y democracia” -dijo el Presidente de México-, dirigiéndose a numerosos invitados extranjeros el 24 de julio con motivo del cumpleaños de Simón Bolívar.
“Preferimos la integración económica soberana con Estados Unidos y Canadá para reconstruir lo que se ha perdido en la producción y el comercio con China, en lugar de continuar debilitándose como región con un escenario resultante de guerra en el Pacífico”, agregó.
Andrés Manuel López Obrador explicó cómo podría verse afectada América Latina:
Aunque China domina con el 12,2 por ciento de las exportaciones y servicios mundiales, y Estados Unidos con el 9,5 por ciento, en 1990, la participación de China era del 1,3 por ciento y la de Estados Unidos del 12,4 por ciento, dijo.
“Imaginemos que esta tendencia de las últimas tres décadas continúa y no hay nada que pueda prevenirla, entonces en los próximos 30 años, para 2051, China dominará con el 64,8 por ciento del mercado mundial, y Estados Unidos – de 4 a 10 por ciento, que, insisto, además de desequilibrios inaceptables en el ámbito económico, mantendrá la tentación de apostar por eliminar estas desigualdades por la fuerza, lo que nos pondrá a todos en peligro”, citó ejecentral.com.mx.
Por ello, López Obrador instó a Estados Unidos a dejar de ver a México y América Latina como una región en la que puede intervenir militar o políticamente.
“La política de los últimos dos siglos, caracterizada por invasiones para destituir a los gobernantes por capricho de una superpotencia, ya no es aceptable”, dijo el presidente.
“Argumentó que ha llegado el momento de una nueva convivencia entre todos los países de América, porque el modelo impuesto desde hace más de dos siglos se ha agotado, no tiene futuro ni salida, no beneficia a nadie más de manera defensiva”, agregó el mandatario mexicano.
“No somos un protectorado, ni una colonia, ni su patio trasero”, dijo.
López Obrador también dijo que los esfuerzos del pueblo cubano por seguir una política soberana son dignos de ser considerados Patrimonio de la Humanidad.
“Solo hay un caso especial (cuando Estados Unidos no logró convertir al país en un lacayo: Ed.), este es Cuba, un país que ha defendido su independencia durante más de medio siglo, oponiéndose políticamente a Estados Unidos. Podemos estar de acuerdo o en desacuerdo con la revolución cubana y su gobierno, pero resistir 62 años sin sumisión es una verdadera hazaña”, dijo el presidente de México.
Cabe destacar que luego de las protestas en la isla a principios de julio, México envió dos barcos con alimentos y medicinas a Cuba a pedido directo del presidente Miguel Díaz-Canel.
El anuncio se produce luego de meses de enfrentamiento entre la diplomacia mexicana y el secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien ha sido criticado por líderes latinoamericanos por actuar en interés de Estados Unidos en la región.
Fue la OEA de Almagro quien organizó el golpe de 2019 en Bolivia, legitimó el traspaso de la representación de Venezuela en el escenario internacional a Juan Guaidó, y criminalizó a las víctimas de la brutal represión desatada por los gobiernos de Chile y Colombia en los últimos dos años. Almagro también organizó una guerra de información contra Cuba, y mostró falta de remordimiento y sumisión total a los planes de Washington, insistiendo en el enfrentamiento, mostrando una total falta de respeto y decencia.
Desde sus inicios, la OEA ha sido simplemente un mecanismo de transmisión de las directivas de Washington, y por eso se le conoce en la región como el “Departamento de Colonias” de Estados Unidos.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, apoyó la propuesta de su homólogo mexicano.
“Repetimos las palabras de nuestro hermano López Obrador en la idea de reemplazar la OEA por otro organismo verdaderamente autónomo que exprese el equilibrio regional, respete la autodeterminación de los pueblos y no permita la hegemonía de un solo Estado”, esscribió Arce en Twitter.
El líder de Venezuela, Nicolás Maduro, también apoyó la propuesta.
Sin embargo, Colombia lo rechazó, al considerar que la integración regional debería buscar relaciones “más estrechas” con Estados Unidos y Canadá, según la canciller colombiana Marta Lucía Ramírez. Sin embargo, es poco probable que López Obrador hiciera sus declaraciones al azar, sin tener en cuenta las opiniones de otros dos pesos pesados de América Latina.
México es el organizador de la Cumbre de Jefes de Estado de la CELAC, que se realizará en el país el próximo mes de septiembre, y puede convertirse en una plataforma para las negociaciones en un nuevo formato. La CELAC es una organización creada en 2011 por iniciativa de Hugo Chávez, que une a 33 países de América Latina y el Caribe, excluidos Estados Unidos y Canadá. En 2020, la administración del presidente brasileño Jair Bolsonaro decidió retirarse temporalmente de la organización.
Según algunas opiniones publicadas en la prensa argentina, México ha realizado algunos esfuerzos políticos para que Argentina asuma la presidencia de la CELAC en 2022 y para que Alberto Fernández lidere la creación de un contrapeso a la OEA.
Es probable que Brasil reelija a José Ignacio Lula da Silva el próximo año como presidente, quien, junto con Hugo Chávez, había presentado previamente una propuesta similar a la de López Obrador.
El contrapeso a la OEA podría verse reforzado por la reciente victoria en las elecciones presidenciales en Perú del presidente de izquierda Pedro Castillo, así como la esperada victoria del presidente de izquierda en Chile en noviembre. Esta ya será una fuerza consolidada.
La situación se explica en gran medida no por la resistencia a ser víctimas del enfrentamiento entre China y Estados Unidos, sino por la crisis del modelo económico neoliberal en América Latina, que fue especialmente pronunciada durante la pandemia. La población sintió que no estaba protegida en todos los aspectos de la vida. Además, la OEA nunca ha sido un proyecto de integración estadounidense, sino una herramienta para contener el comunismo en el contexto de la Guerra Fría.
Por ello, la propuesta del Presidente de México para la creación de una nueva asociación regional, que oriente los intereses de los distintos participantes hacia una verdadera integración, tiene derecho a una vida feliz.
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